martes, abril 16, 2024
Policiales

La familia de Pérez Volpin pedirá investigar al sanatorio por encubrimiento: “Deberían estar presos”

 

La familia de Débora Pérez Volpin implora justicia por su muerte y también desea que lo que le pasó a ella no vuelva a suceder. Por eso, además de pedir pena efectiva para el endoscopista y en suspenso para la anestesista, también solicitará investigar a un médico que lavó el endoscopio y a dos autoridades del Sanatorio de la Trinidad que habrían entorpecido la causa para evitar que la verdad saliera a la luz.

Diego Pirota, abogado de la familia de la periodista, explicó en una rueda de prensa fuera del Palacio de Tribunales: “Luego de la sentencia, pediremos extraer testimonios sobre otras personas responsables porque queremos que esto no vuelva a pasar”.

“Iremos contra el director médico del sanatorio, Roberto Martignano, el director médico general de Galeno, Eduardo Cavallo, y el médico Cecchi. Ellos ya deberían estar presos porque entorpecieron la investigación“, advirtió el letrado de la querella.

Puntualmente, Pirota consideró que los médicos “tuvieron entre cuatro y cinco horas” para acomodar el quirófano tras el desenlace fatal para evitar saber la verdad: “Cecchi lavó el endoscopio y alguien le limó el número de serie. Todo muy absurdo”.

a familia de Pérez Volpin también pedirá investigar a Miriam Frías, instrumentadora quirúrgica, por falso testimonio, es decir por mentir o callar verdad: “Ella fue la tercera persona en el quirófano, pero dijo no recordar nada o ver algo, aunque luego intentó responsabilizar a la anestesista sosteniendo hechos que clínicamente son imposibles”.

Pirota también explicó por qué mensuró el pedido de pena para el endoscopista Diego Bialolenkier y la anestesista Nélida Inés Puente: “Como no tienen antecedentes, no pudimos plantear el máximo. Por eso morigeramos el planteo: 4 años y 5 meses para él; 3 años en suspenso para ella; y 10 años de inhabilitación profesional para ambos”.

Y, sobre el final, advirtió: “Si el tribunal las condena, no deberían ejercer la profesión. Ni siquiera reconocieron que estuvo mal lo que hicieron con Débora”.

 

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