viernes, abril 19, 2024
Golazo HD

“La selección merece una despedida en La Bombonera”

 

Claudio Tapia abre las puertas de su oficina en el tercer piso del edificio de la AFA. El espacio, en el que hace unos días se sentaron Gianni Infantino y Alejandro Domínguez, máximos dirigentes de la FIFA y la Conmebol, está dominado por dos fotos. Una aparece a la izquierda del presidente: es de la final del Mundial ’78, con todo el equipo argentino formado antes de comenzar el partido con Holanda en el Monumental. La otra, a la derecha, es su análoga de México ’86. Maradona domina las dos filas de futbolistas, segundos antes del pitazo inicial contra Alemania. Debajo, el pie de foto: “Gentileza Diario La Nación. Alberto Montano”. El actual presidente de la AFA, que fue futbolista y gestionó Barracas Central, sueña con tener una instantánea similar en Rusia. “Tenemos un grupo conformado que nos va a dar el mejor Mundial”, avizora.

-¿Qué significa el abrazo con Messi al final del partido con Ecuador?

-Cuando termine el mundial en Rusia me voy a acordar del abrazo, porque va a coronar una nueva etapa en el fútbol argentino. Estoy convencido de que nos va a ir muy bien. El abrazo refleja el inicio de una nueva etapa. Messi siente que la dirigencia argentina lo ha defendido, y que pagó la deuda de las finales que no se pudieron ganar con esta, que era una final de mucho carácter: en Rusia tendremos el resultado deportivo que coronará a Messi. Está en la etapa de madurez justa. He podido hablar con él y ya tiene claro qué es lo que va a hacer con su vida de acá para adelante. Hasta cuándo va a jugar. Dónde va a vivir. Está en el momento justo. Muy justo. Él sabe que este es su mundial.

-¿Qué cambia con la clasificación?

-Ahora vamos a poder trabajar: han conformado un grupo que ha podido sobreponerse a la adversidad. Este grupo nos va a dar el mejor mundial. Y ahora, con la posibilidad de comunicación que se abre, van a cambiar un montón de cosas.

-¿Qué cosas?

-Tiene que haber un trato más amable, con respeto, de ambas partes [el plantel y la prensa]. Antes de jugar con Uruguay yo ya sabía que ellos iban a empezar a hablar una vez que Argentina estuviera clasificada. Ese abrazo con Messi fue un poco la comunión entre jugador y dirigente. Es una manera de entender que, después de levantar la veda, somos necesarios todos. Para lograr un objetivo deportivo, todos tenemos que poner algo, y estar encolumnados detrás de un proyecto. Es la única posibilidad de que nos vaya bien. Los jugadores también necesitan la comunicación. Y la comunicación la tienen ustedes.

-Pero ellos también tienen que entender que no todos los periodistas son iguales.

-Exactamente. Pero tenían una presión brava. El objetivo se desvirtúa. Y es lo que no hay que perder. La crítica ya superaba cualquier cosa. Necesitábamos tranquilidad.

-Habla de los cuestionamientos exagerados. ¿Qué autocrítica hace la dirigencia de todo el proceso eliminatorio?

-Siempre fui autocrítico. Hubo autoridades durante 9 meses que no fueron electas por la dirigencia, que trajeron un técnico que no era representativo, ni tenía el respaldo de la dirigencia del fútbol argentino. Es más, les preguntaron a los jugadores. Después les dijeron: “Vamos a traer a Sampaoli. Vamos a hacer el esfuerzo”. ¡Y trajeron a Bauza! Entonces, ese es un error. Fue un error no haber dado los jugadores (a la selección olímpica) a Martino, porque él no se hubiera ido. Cuando se va ya teníamos dos años de trabajo, una identidad futbolística, le había tocado jugar tres partidos de Eliminatorias sin Messi. Habíamos ganado. Había empezado el recambio generacional de jugadores: para Mascherano ya tenía a Kranevitter; para Di María tenía a Gaitán. Para Zabaleta, a Mercado. Él ya venía realizando el cambio. Para Higuaín o Agüero, tenía a Dybala.

-Para Otamendi tenía a Cuesta.

-Se venía haciendo el proceso, que se rompió. Y cuando vos rompés, es muy difícil… Para una selección, dos años de trabajo son muchísimo. Se rompe eso por decisión propia, pero porque había una AFA acéfala, porque se debía seis meses [de sueldo], porque realmente [Martino] no sintió el respaldo necesario.

-¿Quería que se fuera Martino?

-No. Porque veía todas estas cosas. Porque veía que los jugadores habían incorporado la idea del cuerpo técnico. Ya sabían que tenían el recambio generacional que tiene que darse. Y que se rompió porque en el último tiempo en juveniles tampoco se trabajó. Es lo que nos va a costar después de Rusia: vamos a tener una franja en la que van a quedar muy pocos de este grupo. Entonces, perdimos dos años. El después de Rusia no va a ser fácil.

-¿Se sienta a hablar de fútbol con Sampaoli?

-Sí. Hablamos mucho con todo el cuerpo técnico.

-¿Le dice algo desde su lugar?

-Yo no le digo qué es lo que tiene que hacer. Pero si veo algo, se lo digo, porque por ahí puedo aportarle algo, sin que tenga nada que ver en nada.

-¿Alguna vez le tomó alguna de esas visiones?

-La verdad… es muy particular. Si me diera bola con el sistema, yo no correría tantos riesgos. La línea de tres les cuesta a los técnicos cuando no la tienen aceitada. Lleva un trabajo. Tenés que trabajarla todos los días durante un tiempo y tener jugadores muy especiales. Son decisiones que él toma. Uno puede decir qué es lo que ve del sistema de juego, mejor o peor. Nada más.

-¿Habrá amistosos previos al Mundial en la Bombonera?

-(Risas) No lo pensamos, pero me parece que [los futbolistas] merecen una despedida en la Bombonera. Te digo lo que hablamos con los chicos: ellos, a pesar del resultado, se sintieron muy bien y disfrutaron mucho de lo que sintieron.

-¿Se lo dijeron?

-No me dijeron “queremos jugar las próximas eliminatorias o hacer una despedida en la Bombonera”. Pero sí, en la charla me dijeron que lo que sintieron en la cancha de Boca fue importantísimo. Y les dio lástima no haberlo coronado ganándole a Perú.

-¿Qué le dijo el presidente de Boca ese día?

-Yo bajé antes al vestuario: faltaban dos o tres minutos. Estaba en la sala de kinesiología. Estábamos solos. Y Angelici me dijo: “Sabés que a la selección no voy. Nunca fui. No participo. Pero voy a acompañarte. No voy a dejarte solo. Si llega a pasar lo peor, vos no podés estar solo”. Fue un gesto.

-¿Piensa que en ese partido usted se jugaba más que Sampaoli?

-No. Te jugás algo porque sos el presidente de la AFA y si Argentina quedaba afuera del Mundial era una catástrofe. Fuimos electos por cuatro años. Sampaoli tiene un contrato por cinco años. Son proyectos, y para que un proyecto se dé en los resultados, tenés que dejarlo y cumplirlo. Como son los proyectos de juveniles. Nosotros nos acostumbramos durante mucho tiempo a formar planteles para competencias. Cuerpos técnicos para competencias de juveniles, pero nunca un proyecto.

La Nación

Comentarios

Comentarios

comentarios

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *