miércoles, abril 24, 2024
Espectáculos

El regreso de Moby

Cuando la publicación del álbum Play lo posicionó como una de las grandes figuras del pop de fin de siglo, Moby ya llevaba editados otros cuatro discos con relativo éxito en el terreno del tecno y el ambient. Pero, sin duda, su entonces flamante trabajo le quitó el rótulo de “artista de nicho” de la frente para masificar el alcance de su música.

Que Play haya vendido 12 millones de copias y haya sido el primer álbum de la historia que tuvo la totalidad de sus temas licenciados para ser utilizados en películas, shows de televisión o comerciales para televisión habla de su habilidad para conectar su pulso creativo con el “gusto popular” y con las ligas mayores de la industria del entretenimiento.

Pero lo cierto es que ese momento no fue tanto más que eso, y con el paso del tiempo el nombre de Richard Melville Hall volvió a perderse en cierto anonimato, a pesar de haber mantenido un ritmo de producción constante, con mayor presencia en el universo audiovisual.

Ahora, el músico nacido el 11 de septiembre de 1965 en el Harlem neoyorquino apuntará a recuperar parte de aquella presencialidad -palabra tan de moda por estos días-, con su nuevo álbum Reprise, del cual este viernes fue publicado el primer adelanto, que no es otro que su viejo hit, Porcelain.

Claro que, por si alguno sospecha que se trata de algo así como un Grandes éxitos, habrá que aclarar que sí, pero a medias. En verdad, según la gacetilla promocional, Reprise ve cómo Moby vuelve a visitar e imaginar grandes momentos musicales de su pasado.

Traducido, quiere decir que el artista tomó algunos de sus clásicos y sus temas más reconocibles, para junto a la Budapest Art Orchestra, actualizarlos con nuevos arreglos para orquesta e instrumentos acústicos.

Sólo que para hacerlo, Moby no estuvo solo, sino que sumó invitados procedentes de todo el espectro musical, entre los que figuran Alice Skye, Amythyst Kiah, Apollo Jane, Darlingside, Deitrick Haddon, Gregory Porter, Jim James, Kris Kristofferson, Luna Li, Mark Lanegan, Mindy Jones, Nataly Dawn, Skylar Grey y Víkingur Ólafsson.

Como si todo esto fuera poco, la publicación del álbum es a través del sello Deutsche Grammophon que, históricamente reservado para la edición de la llamada música clásica o académica, en los últimos tiempos abrió su espectro a músicas que bordean ese mundo de diversas maneras.

Entre los temas que incluye Reprise, además de Porcelain, se destaca su primer tema de dance, Go, además de Extreme Ways (famoso por la serie de películas de Jason Bourne), Natural Blues y Why Does My Heart Feel So Bad?

Después de tres décadas de carrera, Reprise no es tanto un disco de grandes éxitos sino una oportunidad de reflexionar sobre el modo en que el arte puede adaptarse con el paso del tiempo a entornos y contextos diferentes“, señala el texto promocional.

Por su parte, Moby explica que para él, aunque parezca una perogrullada, el principal propósito de la música es comunicar emoción y “compartir algún aspecto de la condición humana con quienquiera que esté escuchando”.

¿Por qué contar con una orquesta?“, se pregunta, y responde: “Anhelo la sencillez y la vulnerabilidad que puedes conseguir con la música acústica o clásica”.

Las semillas para Reprise se plantaron cuando Moby recibió una invitación para participar en su primera colaboración clásica: un concierto en directo con su música en el Walt Disney Concert Hall con su amigo Gustavo Dudamel y la Orquesta Filarmónica de Los Ángeles en 2018.

Para el artista, Reprise es apenas uno de los capítulos que se tiene reservados para vivir en este 2021, que tendrá además el estreno del documental MOBY DOC, dirigido y montado por Rob Bralver, con fecha de estreno programada para el 28 de mayo, en coincidencia con el lanzamiento del álbum.


En 2019, Moby publicó su autobiografía, “Then It Fell Apart”, en la que reveló el costado más oscuro de su vida.

MOBY DOC es un documental biográfico surrealista narrado por Moby al tiempo que reflexiona sobre su turbulenta vida personal y su música icónica desde los tiempos en que formó parte de bandas de punk underground hasta convertirse en un artista solista en los más alto de las listas y desde un drogodependiente con problemas a activista vegano.

Lo cierto es que tras una experimentación, a los 19 años, con LSD, Melville Hall comenzó a sufrir ataques de pánico con los que de a poco aprendió a convivir, pero que logró dejar atrás entre 1987 y 1995, lapso en el que vivió una vida “muy limpia” y se abstuvo de drogas, alcohol, y “en su mayor parte”, sexo.

Sin embargo, la muerte de su madre, en 1997, lo llevó, guiado por “una epifanía”, a experimentar con alcohol, drogas y sexo; una vorágine que continuó durante cuatro años después del éxito comercial de Play.

Los excesos continuaron durante un tiempo, a tal punto de pedirle al público que le proveyera drogas durante los conciertos, hasta que derivaron en un intento de suicidio, 13 años atrás, que lo determinó a tomarse la cuestión en serio.

A partir de una decisión que defendió a capa y espada, el 18 de octubre de 2008 Moby dejó de consumir drogas, adoptó el veganismo como norma y se hizo habitué de las reuniones de Alcohólicos Anónimos.

El documental contiene entrevistas con David Lynch y David Bowie, así como imágenes rodadas en conciertos, utilizando una combinación de recreaciones, entrevistas y material de archivo. (Clarín)

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