viernes, mayo 3, 2024
Espectáculos

Zaira Nara reveló cómo vivió su “parto humanizado”

Disfrutando de su recuente matenidad en San Martín de los Andes, Zaira Nara transita el paulatino crecimiento de Viggo junto a su pareja Jakob Von Plessen y su hija Malaika. A dos semanas de haber dado a luz, la conductora recordó cómo vivió el proceso y diod etalles de cómo se lleva a cabo un “parto humanizado”.

Anteriormente, la modelo había contado que eligió la Patagonia como lugar de nacimiento para estar junto a su pareja a la hora de convertirse en madre por segunda vez. Además, buscó una clínica que cumpliera con los criterios para abordar esta metodología de parto en la que debe cumplirse con todos los deseos de la mujer.

Parir duele… pero no es como nos cuentan“, advirtió la presentadora en su publicación de Instagram. En la misma, adjuntó una imagen en la que se la ve en la cama de la clínica rodeada de su familia. “Porque duele de mil dolores“, agregó.

En un extenso mensaje, Zaira manifestó todas las emociones por las que tuvo que atravesar durante la llegada de su pequeño al mundo. Como era de esperarse, cientos de mujeres se sintieron identificadas con sus palabras y así se lo expresaron en los comentarios del posteo. “Cuando las contracciones te dejan sin aire. Cuando el miedo te vacía y bloquea. Cuando te desgarras con tu furor de fuego. Cuando pujas y tu cuerpo se vuelve una maquinaria pesada, ruidosa, lenta, dolorida y adormecida… Tan bella y poderosa“, relató.

“Cuando las ganas se disipan y estás tan cansada que ya no puedes más. ‘Me muero’, dices, y es cierto: te mueres“, afirmó sin tabúes y remató: “Y es justo ahí, cuando crees morir, cuando sientes y gritas que ya no puedes más, que ahí se para todo. Que ya no sigues (…) Y entonces… Tu hijo nace de ti, contigo“.

La hermana de Wanda Nara aclaró que desconoce al autor del texto que compartió en sus redes, pero aseguró que se sintió “cien por ciento identificada“.

Leé la publicación completa de Zaira Nara sobre el parto

Parir duele…

Pero no es como nos cuentan.

Porque duele

De mil dolores, sí.

Porque estás ayudando a nacer a tu hijo, pero también te estás pariendo.

Duele porque de pronto percibes y conoces el poder de tus caderas, que se abren hasta mucho más allá de su límite.

Duele porque todos tus huesos y órganos, todo aquello que en tí conoces y desconoces.

En tu yo cuerpo, En tu yo piel, En tu yo mujer, hembra, animal…

Se expande más allá de los límites. Mas allá de lo que jamás en tu vida pudieras o volverías a sentir.

Claro que duele parir. Mucho. Del mil dolores te digo.

Cuando las contracciones te dejan sin aire. Cuando el miedo te vacía y bloquea. Cuando te desgarras con tu furor de fuego.

Cuando pujas y tu cuerpo se vuelve una maquinaria pesada, ruidosa, lenta, dolorida y adormecida…

an bella y poderosa. Cuando las ganas se disipan y estás tan cansada que ya no puedes más.

“Me muero” dices, y es cierto: te mueres. Y qué fortuna verte morir así, Diosa. Qué regalo.

Sí, algo de la mujer que conoces muere un poco y te pares, hermana, a ti misma en un acto de poder, de generosidad y entrega.

En un acto humilde y místico. Así, tan pesada, ruidosa, asustada, dolorida y cansada…. te naces.

Y eso no nos lo cuentan. Eso lo vives y se vive viéndote. Y es justo ahí, cuando crees morir, cuando sientes y gritas que ya no puedes más, que ahí se para todo. Que ya no sigues…

Justo cuando estás en el limbo del neocórtex, y en el limbo tambien de la vida/muerte/vida, que la coronación está cerca.

Que tu cría empuja… y tú empujas… Que la conexión se abre. Y ese acto sagrado, de sangre, liquido, oxitocina, sudor, amor y grito…

Tiene el sonido casi silencioso. El sonido de los ecos, del universo y las raíces… Que es el canto del nacimiento de la vida.

Hmmm profundo sonido de las aguas… Y entonces… Tu hijo nace de ti, contigo. Calentito. Arrugados. Asustados. Vulnerable. Cachorro…

Tan hermosa. Preparado para olerte y amarte… Como tú, nueva mujer, paridora de la vida, del placer

Y de ti misma. Madre.

Fuente: Diario Show


Comentarios

Comentarios

comentarios

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *